Ecuador anunció este jueves su retiro del grupo ALBA tras expresar su "frustración" con el gobierno de Nicolás Maduro por la "falta de voluntad" para solucionar la crisis interna que ha obligado a migrar a cientos de miles de venezolanos.
Con esta decisión, el gobierno de Lenín Moreno siguió marcando distancia con el que fuera el mayor aliado de Ecuador en la época de su antecesor y ahora rival político Rafael Correa (2007-2017).
Quito "anuncia que no continuará su participación dentro" la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), señaló en rueda de prensa el canciller José Valencia.
"La decisión de la salida del #Alba es una decisión firme del Ecuador, lo que busca es ratificar la independencia de nuestro país en su accionar general en la política regional, un accionar marcado en principios", @ValenciaJoseEc #MovilidadHumanaEc pic.twitter.com/DELWRkIFGh
— Cancillería Ecuador (@CancilleriaEc) 23 de agosto de 2018
Sin embargo, añadió, Ecuador tampoco se integrará "a otros grupos de Estados que no propicien soluciones constructivas" para la crisis en Venezuela.
Ecuador se había incorporado en 2009 al AlBA, una iniciativa de integración política y económica que en su momento impulsaron los fallecidos Hugo Chávez y Fidel Castro como contrapeso a la OEA y a la influencia de Estados Unidos en la región.
El canciller hizo el anuncio tras afirmar que el gobierno "está frustrado por la falta de voluntad política" del gobierno de Maduro "para abrir las puertas a una solución democrática" a su enfrentamiento con las fuerzas opositoras, en medio de la postración económica del país con mayores reservas del petróleo en el mundo.
"Solo una estabilidad democrática en Venezuela producirá una estabilidad económica que evite la continuación del éxodo masivo de sus ciudadanos", señaló Valencia.
Con la salida de Ecuador, la ALBA queda conformada por Antigua y Barbuda, Bolivia, Cuba, Dominica, Granada, Nicaragua, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, Surinam y Venezuela.